28 de enero de 2007

'El papel de la mujer' es... no dar golpes periodísticos

Este fin de semana, los diarios patearon en el piso a Catalina Depassier. 'Joe Black' y Carlos Peña le dieron en El Mercurio. En Reportajes de La Tercera, la periodista de 'Revista Paula' Ximena Pérez Villamil terminó de reventarla. Sin embargo, su nota dejó además bastante mal parada a la revista, suscitando muchas dudas respecto a su postura editorial. La periodista reveló un trozo inédito de una entrevista a Depassier, que hizo hace un mes para Paula. En la entrevista, Depassier asegura tener título de filósofa, inventa una tesis de grado y dice que en el colegio tenía promedio 6,3. Todas mentiras de calibre psicopático, según confirmó la investigación de Pérez Villamil. Pero esa certeza la tuvo sólo un día después de que la revista se fue a imprenta. Es decir, aunque tenían la sospecha fundada de que podían tener un gran golpe periodístico entre manos, las encargadas de Paula igual decidieron imprimir la revista con una entrevista que hoy nadie recuerda. No sólo eso, luego de tener el dato se lo guardaron, dejando que el diputado Monckeberg y El Mercurio golpearan con la noticia recién la semana pasada. Todo esto nos deja con muchas preguntas...
  • ¿Por qué Paula decidió tirar igual una entrevista inocua, pudiendo esperar a confirmar el golpe periodístico?
  • ¿Acaso las revistas femeninas no pueden ser punzantes? ¿Consideran que una revista femenina se desperfila si da golpes periodísticos?
  • Aunque fuera así, ¿qué lealtad tiene Paula con La Tercera? Considerando que tenían un golpe duro y que habían decidido no publicarlo, ¿por qué no lo pasaron para que La Tercera golpeara?
  • ¿Estaban protegiendo de algún modo a Depassier o al Gobierno? (las organizaciones periodísticas son muy despelotadas para cualquier teoría conspirativa, pero igual es placentero armarlas...)
  • Y si efectivamente se la pasaron ¿por qué Paula/La Tercera dejó que Monckeberg y El Mercurio los golpeara?

Paula parece haber decidido: no hagamos periodismo "duro". El papel de la mujer no es leer temas "políticos" o punzantes. Y luego nos lamentamos de que nuestras revistas no tengan el nivel y el nervio periodístico de las gringas o las argentinas.

¿A quién vino a rescatar la pequeña gigante?

Como sugerí antes, la visita de la pequeña gigante además de maravillosa, me pareció imprescindible. La dulzura de la niña nos convulsionó y nos hizo muy bien. Nos hizo felices y nos demostró que el dinero y el progreso no lo son todo.
Pero... un momento. ¿Acaso esa felicidad no costó $400 millones de pesos, según reportó El Mercurio?
Esto me hizo pensar en la pequeña polémica a propósito de Tironi, The Economist y la felicidad. The Economist dice que pedirle al sistema capitalista que sea capaz de generar no sólo riqueza, sino felicidad, es pedirle demasiado.
Pero contrariamente a lo que supone la mayoría, eso fue de algún modo lo que vimos este fin de semana. ¿Como así?
  • El libre mercado hizo que el cobre llegara en Londres a máximos históricos el 2006.
  • Eso hizo la felicidad de las mineras, entre ellas Escondida, que obtuvo aprox US$ 5mil 500 millones en utilidades.
  • Escondida aportó cerca de US$1,5 millones para Santiago a Mil y Royal de Luxe, según la misma nota de El Mercurio (vía ley Valdés, probablemente, aunque el monto supera largamente las 14 mil UTM, límite hasta el cual puede descontar impuestos).
  • La muñeca hizo la felicidad de los niños.
  • La alegría de los niños hizo la felicidad de los papás.
  • La felicidad de los papás hará que respondan con alegría y optimismo cuando las encuestas les pregunten acerca su evaluación de la situación actual y la administración del país.
  • Las encuestas harán la felicidad de Bachelet.
El pueblo necesita pan y circo. A pesar del toque peyorativo, creo que la frase guarda una sabiduría que viene de muy lejos. Esta vez, el circo lo financió la Minera Escondida. De manera bastante sigilosa. No es por querer ponerme el snorkel y ver bajo el agua, pero entre tanta felicidad ¿qué ganó la Minera Escondida?

27 de enero de 2007

La ideología de la imaginación

"Todos necesitamos soñar, como cuando éramos niños, y reencontrar esa forma de contacto tan rara entre realidad y sueño. Si no sentimos en nosotros mismos la posibilidad de soñar, entonces te sientes prisionero de ti mismo, sin esperanza de cambio. Esa esperanza sigue estando porque alguna vez tuvimos la experiencia cuando niños de que todo era posible." Jean Luc Courcoult, director de Royal De Luxe.
Erasé una vez una ciudad gris, apagada, donde estaban prohibidos los carnavales y las pastillas del día después, donde la gente sonreía poco, caminaba con la mirada perdida y vivía sólo para trabajar, trasladarse y ver TV.
Entonces apareció una niña gigante.

25 de enero de 2007

Paradojas de "el diario que quieres"

Hoy La Tercera nos deleita con dos maravillosas contorsiones, y todo en un mismo párrafo, al final de la nota que en se defienden de los ataques de Adolfo Zaldívar contra el matutino. Nos deja en claro dos cosas:
1. Que el Consejo editorial de La Tercera no tiene interferencia en la línea editorial del diario.
2. Que el Consejo editorial de La Tercera, lejos de ser "secreto", es un órgano transparente, pero sería completamente innecesario revelar quiénes son sus 15 misteriosos integrantes. ¿Para qué? Irrelevante, pues.
Justo hace una semana La Tercera hizo una editorial escandalizándose porque Francisco Vidal dijo que Chiledeportes "se manda solo". Ahora resulta que el consejo editorial de La Tercera es un club de rayuela, y que los periodistas del diario... se mandan solos.
PD: No es lo mismo y no tiene nada que ver, pero me recordó la contorsión tipo Pilates (¿Pilatos?) de Vidal cuando, como Ministro Secretario General de Gobierno de Lagos, razonó impecablemente respecto al despido de Alberto Luengo de la dirección de La Nación. Dijo que “la línea editorial de un diario que es de gobierno tiene que coincidir con el gobierno”. Pero “esto, bajo ninguna circunstancia significa ni la menor señal de restricción a la libertad de prensa”.
Beautiful.

23 de enero de 2007

No lo digo yo, lo dice Tironi

Eugenio Tironi, en su columna de hoy en El Mercurio, invoca al semanario británico para buscar apoyo en su cruzada por la felicidad. Y lo hace de este modo:
Es cierto, The Economist ratifica la importancia de un tema que Tironi ha posicionado en la agenda pública local. Eso es un mérito.
Pero, ojo, The Economist no suscribe la postura de Tironi respecto a este tema, tal como el sociólogo quiere sugierir. La posición de la revista, expresada en el título de su editorial del 19 de diciembre, no puede ser más clara:
Happiness (and how to measure it) Capitalism can make a society rich and keep it free. Don't ask it to make you happy as well
Lo que Tironi ha venido sugiriendo no es una vuelta al Estado de Bienestar europeo clásico (como acusó Sebastián Edwards). Su postura es menos extrema pero también algo más imprecisa: "haríamos bien en aprender tanto de EE.UU, como de Europa para evitar o mitigar los efectos más negativos del curso que hemos adoptado en materia de felicidad”. Al menos así lo ha expresado en una columna reciente, en respuesta a la de Edwards.
Pero nada de ello tiene que ver con la postura de The Economist. Para The Economist el tema no debe achacarse per se al sistema económico de libre mercado: simplemente no hace sentido. Por si queda dudas, así cierra la revista su editorial: "To find the market system wanting because it does not bring joy as well as growth is to place too heavy a burden on it. Capitalism can make you well off. And it also leaves you free to be as unhappy as you choose. To ask any more of it would be asking too much". Rotundo.
No me parece correcta la manera en que Tironi se cuelga a la revista. En este caso es al menos una falta de rigor arrogarse el respaldo de The Economist (que, por otro lado, es una publicación muy sólida pero, convengamos, tampoco es el Corán). Respeto mucho a Tironi y es sin duda uno de los intelectuales locales más relevantes, pero creo que cometió un error al decir "no lo digo yo, lo dijo The Economist".

22 de enero de 2007

Campaña y Protesta en Second Life: una lección 2.0 para los políticos

En comunicación política, las cosas van más rápido de lo que podemos imaginar. La web 2.0 nos está despeinando y no hay cómo pararla. Ya era todo un acontecimiento que LePen y Segolene llevaran su campaña al mundo virtual de SecondLife. Pero antes siquiera de entenderlo, la nueva noticia (valga la redundancia) era que los habitantes de este mundo le estaban haciendo una furibunda protesta al líder del Frente Nacionalista franchute, justo frente a su comando virtual. Por si no ha quedado claro, la lección para los políticos es esta: la web 2.0 es de la gente. Y no se juega con los juegos de la gente, porque aquí, la elite no tiene quién la defienda.

21 de enero de 2007

Los calzoncillos de David Cameron

¿Qué significa la web 2.0 para los políticos? Implica que Internet ya no se trata de tecnología: se trata de personas reales. En este contexto, la ropa interior del líder conservador es toda una señal.

David Cameron, el joven líder conservador inglés que toda la derecha chilena admira y envidia (ver artículo en C&C), acaba de lanzar su propio sitio web: http://www.webcameron.org.uk/. El sitio es muy sencillo en lo visual y tiene pocas secciones: un blog, noticias, invitados y mensajes del público. Pero aún así llama poderosamente la atención. ¿Por qué? Es el primer sitio web de un político en utilizar genuinamente los códigos de la era YouTube: está plagado de videos breves, formato homemade. Todos protagonizados por David y su equipo, por supuesto. Sólo por curiosear, me metí en el primer video, una suerte de bienvenida al sitio. Con sólo presionar “play” ya estaba adentro de la estrecha cocina de la casa de David, y David me hablaba directo a los ojos. Antes de terminar la primera frase (“Ehhr… bueno, bienvenidos a WebCameron…”), su hija de tres años lanza un alarido exigiendo su comida. Cameron sorprendido se sonríe, voltea y le dice: “dame un minuto, ¿qué estás haciendo? Lávate las manos… dame un minuto”. Luego me mira de nuevo y dice: “¿Dónde estábamos? Ah! Bueno, esta es una excelente manera para comunicarnos directamente y contarles lo que el Partido Conservador está haciendo, qué nos mueve y darles acceso al “behind the scenes” de cómo desarrollamos nuestras ideas”. Entonces, mientras David toma la mamadera y comienza a preparar la papa nocturna de su hija, sucede algo mágico: la cámara gira ligeramente y, aún con David hablándonos en primer plano, podemos apreciar con toda claridad los calzoncillos del seguro próximo Primer Ministro británico, recién lavados y colgados en un tendero. La ropa íntima de Cameron me iluminó y pude ver la mecha que encenderá –qué digo, ¡que ya encendió!- el potencial de Internet para revolucionar completamente el modo de hacer política. Y de paso, la relación de los políticos con el resto de los seres humanos.
Hasta ahora se ha especulado mucho sobre cuál será el verdadero impacto de Internet en la política. Sin embargo, la discusión suele centrarse en las capacidades funcionales de la web para mejorar la posición de un partido o un político, o de los ciudadanos para empoderarse. Veamos. Por una parte, se señaló y estudió la campaña de Howard Dean -en las primarias para la elección presidencial de 2004 en EEUU- como un hito en el uso de la web: en sólo meses creó enormes redes de apoyo y logró que más de 650 mil personas le donaran US$ 56 millones. La fuerza de Internet como plataforma para recaudar fondos de campaña dejó babeando a los líderes políticos. Por otro lado, hace pocas semanas el gerente general de Google, dijo que en el futuro, el principal rol de Internet en política sería el “accountability” (ver nota en C&C): facilitaría que los políticos rindieran cuenta de sus actos, y la ciudadanía podría testear rápidamente si lo que decían se contradecía con datos duros, o simplemente con lo que habían afirmado antes. Por ejemplo, el gobernador de Buenos Aires, Jorge Telerman, fue pionero en instalar una webcam en su despacho (http://www.buenosaires.gov.ar/), para que los internautas puedan asegurarse, de 8 a 12 hrs y sin filtros, que trabaja, contesta llamados y asiste a las reuniones. Pienso que tanto la recolección de dinero como el accountability vía Internet son grandes transformaciones que ya están en curso. Lo mismo puede decirse de la capacidad de formar activas comunidades online, que funcionan como grupos de presión y pueden ser enormemente efectivos (sólo vean cómo estos grupos obligaron a VTR a reponer en menos de dos semanas el canal TyC Sports, que había eliminado unilateralmente de su parrilla). Pero estos son los aspectos más funcionales de la web en la arena política. Si uno mira las páginas web de los partidos y los políticos se da cuenta de que buscan afanosamente generar esos resultados, pero ignoran –o desprecian- algo que Cameron parece intuir sin que nadie se lo diga: la importancia de la dimensión comunicativa en los medios. Esa dimensión apunta a lo más básico de la comunicación: enfatizar aquellos elementos concretos del lenguaje que hacen relevante y satisfactoria la interacción entre dos personas. Eso incluye todo lo que ayude a empatizar, a ser abierto y mostrarse tal cual uno es, mirar a los ojos, ser directo y demostrar aprecio e interés por quienes me escuchan. Parece trivial y evidente, pero es un paso básico para generar confianza y hacerse relevante para el otro. En un momento en el que el electorado se siente lejano de la política, y los políticos puntean con larga ventaja en los rankings de desconfianza, esto deja de ser anecdótico. Los ciudadanos/consumidores tienen el control remoto –o el mouse- en la mano y parecen decir “no voy a escuchar nada de lo que tengas que decir, a menos que te ganes el derecho a decirlo”. En este contexto, los calzoncillos de Cameron surgen como una pista muy interesante. En Chile, Fernando Flores ha impulsado una visión sobre Internet en política y ha logrado generar un gran espacio de conversación a través de su blog personal y su red de blogs Atina Chile. Pero creo que el giro de Cameron es aún más de punta. No te invita a la conversación pidiéndote que leas un texto y escribas opinando sobre un tema. Antes de eso, te invita a pasar a su cocina a charlar (una cocina como la tuya o la del vecino), la noche de un día cualquiera, cuando sus hijos berrean y sus calzoncillos húmedos cuelgan del tendero. Sí, es cierto, la espontaneidad puede ser demasiado intencional, y de seguro está cuidadosamente aprobada por los asesores. Pero la gente castiga la falta de honestidad, y tengo la impresión de que Cameron lo sabe. Además, no es posible mantener una mascarada de “buena onda” por mucho tiempo, sin mostrar más contenidos. La verdadera potencia de Internet –y quizás de cualquier medio de comunicación- aflora cuando logra involucrar a las personas en una conversación, cuando genera la ilusión de cercanía, de intimidad y te hace participar de verdad. Sólo a partir de ahí es capaz de crear redes, generar comunidades participativas y movilizar ciudadanos. Pero para ello, los políticos en Internet deben entender primero que ellos mismos son un medio de comunicación. Y para ser un medio exitoso, deben ser maestros en los códigos de los medios. No basta con colgar una página, poner fotos y transcribir los discursos y noticias (el multimedia Fulvio Rossi va más allá y ofrece wallpapers y música de Marco Masini). Más que farandulizar o abaratar los mensajes, lo central es comprender que un medio de comunicación efectivo en la web -en el sobrepoblado mercado actual- mantiene un contacto frecuente y dinámico con su audiencia. Escucha y se interesa en ella antes de proponerle contenidos e ideas que sean relevantes para quien los escucha. Y sobre todo, aspira a que la audiencia se apropie de él, lo haga suyo. Ciertamente no es imprescindible mostrar los calzoncillos, pero para los políticos subirse a Internet significa bajarse del estrado y abandonar la pompa. Es una gran oportunidad. Y los que no lo entiendan así, aténganse a las consecuencias.

Ver también: Presidenciales en EEUU: La carrera partió en video, en Ciudadano H.

12 de enero de 2007

Dinosaurios redoblan esfuerzos en pos de su extinción

Acabo de ver esta noticia en el sitio de The Guardian: Telegraph gets tough with bloggers "The Daily Telegraph launched a crackdown on its bloggers today, ordering them not to blog about the paper and exercise caution about revealing journalistic "tricks of the trade" as it sought to limit the fallout from relevations about its reporting of Saddam Hussein's execution". El Daily Telegraph es el diario inglés de los conservadores. Todo un brontosaurio de la industria medial. Recuerdo que hace poco hicieron un escándalo porque la Tate Gallery le concedió una sala a Tracey Emin , una de las artistas de vanguardia más importantes en Gran Bretaña. El motivo: se atrevió a insultar a lady Thatcher en una de sus obras (Hate&Power can be a terrible thing).
Ahora, fiel a su estilo, según esta noticia, persigue a los periodistas que bloguean en el mismo diario por el pecado de discutir en público acerca de cómo el diario hace su trabajo. Es decir, se esfuerzan en controlar y reprimir a la gente que podría hacer más relevante su diario. Es razonable que para un diario sea difícil aceptar la crítica que surge desde el interior mismo del medio. Pero si realmente quieren sobrevivir, los diarios deben apretar los dientes y tener el coraje para aguantar. No sólo no censurar esa discusión, sino estimularla.
El episodio del Telegraph es aún más autogol, considerando que los lectores de blogs son, por lo general, un segmento más joven, más informado y con más opinión, al que todos los diarios en el mundo están tratando de acercarse. Quién los entiende. Se acabarán las piedras, pero...

7 de enero de 2007

Yo amo la encuesta del CEP

Perdón por no hacer una genuflexión antes de referirme al oráculo de Delfos chileno. Es cierto, la encuesta del CEP es una encuesta de muy buena calidad. Y sí, es la más generosa en cuanto a su muestra y cobertura geográfica. Y en general, debe ser probablemente una de las más rigurosas en cuanto a su metodología. Y como no, su ranking de celebridades políticas posee una influencia casi legendaria.
Pero no deja de irritarme la facilidad con que los periodistas y analistas abandonan todo sentido crítico cuando se enfrentan a ella. Casi como un tic, no pueden mencionarla sin decir que es "la mejor encuesta posible y la más verdadera", para luego reportar sus resultados como quien lee el Corán.
Pero muchas veces una encuesta correcta en su ficha técnica no es necesariamente una encuesta técnicamente bien construida. Y lo digo porque en las encuestas la forma en que se pregunta es tan o más esencial que su ficha técnica.
Para muestra un botón de la última entrega. Este fue uno de los resultados que generó más titulares.

Simplemente, no es adecuado hacer una pregunta así. Al menos, es equívoca. Es una afirmación compleja, con dos asertos que incluyen una relación causal. Y cualquiera que tenga experiencia realizando encuestas sabe que las personas tienden a confundir su acuerdo con el aserto inicial (en este caso, que la corrupción penetra en la administración pública) con su acuerdo respecto a qué es lo que provoca la corrupción. En simple, hay mucha gente que, confundida, señala estar de acuerdo con la frase entera cuando sólo está de acuerdo con su encabezado. Si nos concentrarámos sólo en la comparación (83 vs 75%), no habría problema. Pero muchos medios informan aisladamente sólo el 83%. De hecho, La Segunda lo reportó así.

Y aquí va otra...

¿Qué es "lo esencial" del sistema electoral? ¿Sabrá el chileno medio encuestado de qué le están hablando? Además, las alternativas no son equivalentes: por un lado "debiera mantenerse" y por otro "debiera cambiarse COMPLETAMENTE". Se introduce un elemento de grados en una pregunta de alternativas cerradas. El resultado: en lo esencial, no es nada claro qué es lo que quiere el público respecto al sistema binominal. Al menos en esta pregunta.

En fin. Creo que encuestas son buenas herramientas (trabajo con ellas todo el tiempo). Y creo que la encuesta del CEP es muy valiosa. Pero, vamos, las encuestas las hacen los humanos. Y esos humanos, también tienen su agendita propia cuando hacen las preguntas que hacen.

Yo quería una portada como ésta

LUN es probablemente el diario más fotográfico y más lúdico en el uso de las imágenes. Sus fotografías son casi siempre muy informativas -mérito, entre otros de, como no, Willi Gómez-. A nivel local, su portada fue una genial innovación, un verdadero alarido colgado en el kiosko. La investigación ha demostrado que los rostros expresivos en primer plano son lo que más vende, pero después de varios años, es evidente que la fórmula está algo desgastada. Queremos más juego, más innovación, más portadas llamativas y no vistas. Para la noticia del tumor de Girardi, yo quería ver el tumor en grande. La fotografía del protagonista de la noticia es siempre imbatible. Y hoy, el protagonista no era Guido. Era el tumor.

3 de enero de 2007

El valor de los diarios se hunde

No tienen sensibilidad ni alma de periodistas -tal vez no la tengan de ningún tipo. Pero los Gordon Gekko de Wall Street tienen un olfato más aguzado que las hienas para percibir animales heridos. Y por lo general, no se equivocan. Este impresionante reporte de Allan Mutter, autor del interesante y bastante factual blog "Reflections of a Newsosour", muestra que los diarios están perdiendo valor a pasos agigantados. Al menos para los inversionistas. Yo creo que para muchos de sus viejos -y jóvenes- lectores también. Qué hacer? ¿Hundirse con la bandera al tope, siempre dignos? ¿Saltar y huir como ratas? Más bien yo creo que hay que renovar y modernizar radicalmente la flota. Vaporized: $13.5B in news stock value By Allan Mutter In a dramatic repudiation of newspapers by investors, the shares of publicly held publishing stocks in the last two years lost nearly $13.5 billion in value, or 20.5% of their market capitalization. To put this in perspective, the vaporized value is greater than the enterprise value of the Tribune Co. or the combined value of the McClatchy, New York Times and Media General publishing companies. The vertiginous drop came at the same time the Dow Jones industrial average soared to an all-time high and other market indicators gained by healthy double-digit ercentages. Continúa en http://newsosaur.blogspot.com/2007/01/vaporized-135b-in-news-stock-value.html

2 de enero de 2007

Ségolène no se queda atrás

''' Igual que Angela Merkel, Ségolène Royal también quiere ser una vlog chick. Y como se ve, tiene mucha más pasta para ello... Sólo por la deformación pseudo-profesional de equilibrar, acá van también los buenos deseos de Nicolas Sarkozy, el contendor de la belle Ségolène por la présidence de la République.

Angela ya se lanzó, ¿y tú Michele cuándo?

Poco antes del inicio del mundial de Alemania, Angela Merkel empezó a postear su propio video blog, directo del desde sus oficinas de "Bundeskanzler" en Berlín. Ha hecho su mejor esfuerzo, pero quienes la vieron la llenaron de ácidos comentarios. Que es muy tiesa, que el video está muy maqueteado y que básicamente le faltaba la naturalidad que deben tener estas cosas tan modernas. Y en realidad es así. Su videocast, como pueden ver, está pasado a encierro y a teleprompter. De todas maneras, es muy interesante cómo los líderes políticos buscan aprovechar este nuevo canal. Tony Blair, mediático hasta la médula, empezó hace unos años y la semana pasada John Edwards lanzó su campaña a la presidencia de EEUU, en formato full web 2.0. Probablemente están intuyendo el enorme potencial para eludir la mediatización de los medios de prensa y su consabido talento para aguarles la estrategia comunicacional con su pátina de sospecha y escepticismo.

Lyssa Bochert, una periodista y blog chick germana la fue a visitar para explicarle cómo había que hacerlo, y con su ayuda Angela se puso a semi-videobloggear ahí mismo, explicando lo mucho que le gusta su Ipod, las verduras y el globo terraqueo para enterarse dónde está el Congo, entre otras cosas. Con todo su espontaneidad y ángel, y expuesta a la crítica constante de los medios, me pregunto: y tú Michelle, ¿cuándo?