Radio Concierto (88.5) está en proceso de reinvención. Algunos dirán de demolición, pero yo miraría las cosas con más cuidado.
La radio cortó de golpe la mayoría de sus programas. Hace una semana estrenaron nuevo slogan: “Presente en tu memoria”, y una continuidad que juega con íconos de la cultura pop ochentera (el “soapizza” de Hermógenes Conache, y frases con spots clásicos y películas).
Todo en línea con su nueva apuesta musical: una fórmula mucho más inclusiva, en base a hits de los ‘80 y principios de los ’90. Una arena musical más amplia en la que batallan –con importantes matices- un buen puñado de emisoras: Universo, Play, X, Club, Activa, entre varias otras.
En simple, una apuesta por salir a disputar un mercado más masivo, abandonando a la parte más vanguardista de su audiencia.
Los cambios coinciden con el cierre de la compra de Iberoamerican por parte de Prisa. Y ahora, también con la salida de su agudo e imaginativo director de radios, Javier Sanfeliú.
Pero también con un período de desgaste y bajas sostenidas de audiencia en Concierto, asociado a un entorno más competitivo y complejo: muchas radios nuevas compitiendo agresivamente por el mismo botín (adultos de 25 a 45 de segmentos altos), y la fuerte penetración de otras maneras de escuchar música (mp3, ipods, etc).
Como sea, Concierto es una gran marca. Su desafío, bajo la batuta de Sergio Fortuño y su directora Natalia del Campo -dos cabezas potentes- será armar una propuesta programática consistente con ese activo, pero con una personalidad nueva y definida.
En un escenario tan saturado como éste, la diferenciación es clave. Y, hacer una radio masiva no significa un diseño menos sofisticado.
No sabemos con qué saldrán.
Lo que sí sabemos es que este caso muestra claramente las limitaciones de la economía de los medios tradicionales.
Un conglomerado de varias radios permite considerables economías de escala. Pero aún así, las radios abiertas no se pueden dar el lujo de perder su vocación masiva. Se puede ser muy segmentado –más bien, se debe serlo-, pero en el dial no se puede abandonar la mayor inclusividad posible.
El modelo de negocios simplemente no da.
Pero ojo. Lo que es un límite para las radios tradicionales, será sin duda una oportunidad para nuevas iniciativas. Hace unos años, los públicos que la radio tradicional no podía satisfacer quedaban huérfanos y haciendo pucheros.
Hoy son espacios que quedan libres para proyectos independientes -o no- que pueden funcionar con estructuras más livianas, como podcasts o radios online.
No creo que esperemos mucho para que se llene este espacio. ¿Quién se atreve primero?
9 comentarios:
qué interesante
Lucho, justamente en esta dirección acabamos de lanzar una radio online. Se llama Mimix.cl y se puede encontrar también en el sitio La Música de Emol. Estamos entregando seis formatos de música que se pueden escuchar en la oficina o en la casa. Estamos segmentando la audiencia y durante las próximas semanadas vamos a ir incorporando otras señales.
A las dos radios que tenemos, Digital FM y Positiva FM, estamos agregando este nuevo formato que nos parece está en línea con el desarrollo de esta industria.
Cómo estás José Manuel?
No tenía idea de lo de Mimix.cl
Lo han promocionado poco o nada parece. Desde la homepage de emol no sé como llegar.
Me parece un proyecto con una tremenda proyección, por la enorme poderosa plataforma que provee emol, porque está todo el día con los codiciados adultos-que-trabajan-conectados, por la experiencia que ya tienen con DigitalFM y por la potencia comercial del consorcio de cara a los avisadores.
Igual creo que es todavía una propuesta muy tímida, incipiente y sin una segmentación atractiva (fija o interactiva). Pero con la promesa implícita en ese nombre ("mi mix") y con todas las posibilidades de lo online para las radios (sobre todo armando comunidades), puede ser dinamita.
Felicitaciones por lo que han hecho en radios. Nos vemos porai. un abrazo.
Llámame vieja escuela pero sigo pensando que el éxito de una radio es que tenga una buena parrilla: excelente música y programas ídem. Audiencias aparte, pa eso está usted, pero Concierto estaba guateando pesado. Zero anda ahí. Horizonte, que vendría siendo el recambio, tiene programas que te los encargo. Y en general nos dan puros sonidos del año del cuete. ¿Quién es el genio que puede demostrarnos fehacientemente que lo que la "rompe" es la onda ochentera? Más parece profecía autocumplida. Segmentación, okey. Pero con riesgo y de eso andamos escasos en un dial que tiene un potencial gigante.
Salud.
No sé si será coincidencia pero...
Justo antes que la Concierto desapareciera del 107.7 de Santiago para pasar a ser FM Hit, su eslogan era "Primera en tu memoria".
Ahora, que muchos dudan sobre si sobrevivirá como parte de PRISA, el lema de la radio es "Presente en tu memoria".
Eso, Saludos Luis
Yo he perdido detalles del derrotero de la Concierto... Creo que hasta Cristián Walkner le metió mano y allí -eso lo recuerdo bien- se habría acentuado el declive. Hablo de unos años atrás que, en perspectiva, parece ser mucho más, y cómo no, si hasta en el dial la frecuencia estaba en la 100. y algo...
Como tú escribes y de lo cual no tengo constancia (por razones ajenas a mi voluntad), "la radio sacó programas vanguardistas de golpe"... ¿"Vanguardistas" en lo musical, temático? No sé; lo que sí tengo presente es que cada vez se hace "más difícil" hacer radio, justamente por la introducción de nuevos formatos de almacenamiento de la información, sus posibilidades, su versatilidad.
La radiodifusión, en general, cuenta con una ventaja y posee un status bien posicionado. Así la cosa no todo es tan pesimista.
En Chile el mercado FM tembló con la llegada de Rock&Pop que no era otra cosa que una copia de esas radios de California: mucha voz por canción, en fin, el formato de la AM estilizada. Yes, dude.
El cambio fue violento, la competencia directa se anuló y debió repetir la fórmula... Rock&Pop acaparó fácilmente más del 60% de la audiencia de los 13-30 años... Ese mismo segmento ya contaba con mayores posibilidades económicas, el consumo crecía, la publicidad de, por ejemplo, Institutos Profesionales y Universidades estaban -están- por todos lados orientados a los jóvenes, no a los papás (aunque sean ellos los que pagan).
Pues bien, el problema de la Concierto fue no saber interpretar a tiempo esta dinámica, creyó que agregándole una conversación seudointelectualoide y aburrida a lo Walkner los ABC1 iban a escucharla... precisamente a las 10 de la noche, cuando todos estaban durmiendo o en el barra de, lo que ellos llaman patéticamente, "pub".
Sí: lo gravitente de la radio es su parrilla musical. Es curioso cómo muchos grupos de calidad de los '70 y '80 quedaron excluidos de las programaciones... Yo no conocía a King Krimson, por ejemplo, y hasta lo consigno con rubor... Es interesante pensar qué hubiera pasado si no se hubiera excluido la música por entonces también contemporánea. El público en general hubiera adquirido una cultura musical más amplia, no limitado al Billboard o a PinkFloyd, The Beatles y The Rolling Stones, como mucho...
El golpe de timón de la Concierto debiera ser esa diferencia en el dial. Si hay 20 programas similares para "el taco", pues hagan uno sólo musical y consiliando más lo temporal, no perdiéndose con lo ochentero que les podría pasar una mala pasada.
El público está abierto a escuchar más cosas nuevas, pero tampoco se van a mamar un mamarracho electrónico-jazz-arena rock porque simplemente no es armónico...
Yo he perdido detalles del derrotero de la Concierto... Creo que hasta Cristián Walkner le metió mano y allí -eso lo recuerdo bien- se habría acentuado el declive. Hablo de unos años atrás que, en perspectiva, parece ser mucho más, y cómo no, si hasta en el dial la frecuencia estaba en la 100. y algo...
Como tú escribes y de lo cual no tengo constancia (por razones ajenas a mi voluntad), "la radio sacó programas vanguardistas de golpe"... ¿"Vanguardistas" en lo musical, temático? No sé; lo que sí tengo presente es que cada vez se hace "más difícil" hacer radio, justamente por la introducción de nuevos formatos de almacenamiento de la información, sus posibilidades, su versatilidad.
La radiodifusión, en general, cuenta con una ventaja y posee un status bien posicionado. Así la cosa no todo es tan pesimista.
En Chile el mercado FM tembló con la llegada de Rock&Pop que no era otra cosa que una copia de esas radios de California: mucha voz por canción, en fin, el formato de la AM estilizada. Yes, dude.
El cambio fue violento, la competencia directa se anuló y debió repetir la fórmula... Rock&Pop acaparó fácilmente más del 60% de la audiencia de los 13-30 años... Ese mismo segmento ya contaba con mayores posibilidades económicas, el consumo crecía, la publicidad de, por ejemplo, Institutos Profesionales y Universidades estaban -están- por todos lados orientados a los jóvenes, no a los papás (aunque sean ellos los que pagan).
Pues bien, el problema de la Concierto fue no saber interpretar a tiempo esta dinámica, creyó que agregándole una conversación seudointelectualoide y aburrida a lo Walkner los ABC1 iban a escucharla... precisamente a las 10 de la noche, cuando todos estaban durmiendo o en el barra de, lo que ellos llaman patéticamente, "pub".
Sí: lo gravitente de la radio es su parrilla musical. Es curioso cómo muchos grupos de calidad de los '70 y '80 quedaron excluidos de las programaciones... Yo no conocía a King Krimson, por ejemplo, y hasta lo consigno con rubor... Es interesante pensar qué hubiera pasado si no se hubiera excluido la música por entonces también contemporánea. El público en general hubiera adquirido una cultura musical más amplia, no limitado al Billboard o a PinkFloyd, The Beatles y The Rolling Stones, como mucho...
El golpe de timón de la Concierto debiera ser esa diferencia en el dial. Si hay 20 programas similares para "el taco", pues hagan uno sólo musical y consiliando más lo temporal, no perdiéndose con lo ochentero que les podría pasar una mala pasada.
El público está abierto a escuchar más cosas nuevas, pero tampoco se van a mamar un mamarracho electrónico-jazz-arena rock porque simplemente no es armónico...
Hay que reconocer los méritos de Sanfeliu, que se atrevió y aposto, al nivel que hoy radios como Zero y Horizonte se reformularon, y sonidos como The Flaming Lips pasaron a formar parte en las parrillas de programación. Pero somos auditores mal agradecidos, lo somos en general, y a la primera prueba o señal de cambio nos movilizamos.
Me duele traicionar a Concierto, la escucho desde antes que tuviera nombre en la 88.5, y ahora la debo dejar porque de verdad no soporto la música de los 80's, ni a Journey ni a Bananarama, e incluso a Madonna, The Cure y Depeche le aguanto un par de canciones y no más.
Pero bueno, Concierto merecía cambiar, y Zero, Tiempo, Duna, Horizonte tendrán la misión de recoger a los mal agradecidos. Pero ojo, y esto es algo que hace venimos escribiendo, no basta con programar buenas canciones si la voz en off es de una mina cuica que habla de su intensa agenda social (es necesario nombrarlas?). Por eso Conierto, tras haber sacado a Calabi y Amenabar, gana en condiciones con profesionales que dominan el contenido.
Esta dificil, las radios deben reconquistar a sus euditores. Yo por ahora, no logro decidirme, asi que mientras elijo me paso escuchando mis discos (de Joni Mitchell, Javiera Mena y Kd Lang).
Saludos
Hola Luis,
Conozco bastante de cerca la realidad de las radios, habiendo trabajado varios años en, hasta cierto punto, la competencia de la concierto: radio duna. Concuerdo bastante en lo que dices: dada la naturaleza masiva de las radios, los grandes consorcios no pueden darse el lujo de segmentar. Mi impresión es que lo que le pasó a la Concierto se repetirá en otras radios, porque la estructura de costos de una radio es muy alto, así como el costo de oportunidad de tener cosas más experimentales en la parrilla. Esto es una oportunidad para Internet... y para los nichos. El año pasado fundamos con un amigo podcaster.cl, y el resultado ha sido increíble.
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