18 de marzo de 2007

EN INFORMACIÓN, LA 'CAJA IDIOTA' SIGUE SIENDO IMBATIBLE

Desapercibido en medio de pueriles chascarros, el martes pasado en La Moneda ocurrió un evento muy relevante, tanto para políticos como para el mundo de los medios. Se lanzó el libro “La Función Política de la Televisión”, editado por la Secretaría de Comunicaciones. Se trata de un compendio muy notable de artículos e investigaciones sobre el impacto de la TV en el mundo público y la política, donde escriben algunas de las voces más autorizadas del medio local, como Carlos Catalán, Valerio Fuenzalida, Cristóbal Marín, Lola Souza y Carlos Peña, entre otros. Conecta Media Research también aportó con lo suyo: el artículo “El fortalecimiento de la TV abierta como centro de la dieta informativa de los chilenos”, que escribimos Ricardo Torres, Juan Jiménez y yo, y que es el motivo de estas líneas. Va a sonar impúdico pero lo voy a decir: este artículo es un hito en la investigación en televisión. Muestra y analiza por primera vez la evolución de la oferta y el consumo de información en TV abierta de toda una década. Curiosamente, los datos estaban ahí y nadie se había tomado la molestia de exponerlos así. El punto de partida es simple. Estamos demasiado embobados con los nuevos medios, y olvidamos aquilatar la enorme contribución de los medios tradicionales. Sobre todo la de nuestra nunca bien ponderada TV abierta. Entre tanta diatriba y lloriqueo por la influencia que ejerce la TV, nosotros decidimos preguntarnos ¿qué ha estado ofreciendo la TV abierta en cuanto a información? ¿y cuál es el comportamiento de la consumo de la gente frente a la información en TV? Veamos sólo algunos de los resultados. UN TSUNAMI DE INFORMACIÓN Entre 1997 y 2006, la oferta de contenidos informativos en TV abierta aumentó… ¡88%! Esto significa que los minutos de contenido periodístico –sólo incluimos los generados por áreas de prensa: noticiarios, avances, programas de reportajes, debates y entrevistas de actualidad- prácticamente se duplicaron en 10 años. Esto es muy impactante, porque no estamos contando la enorme cantidad de información de actualidad que se entrega –con un estilo muy distinto- en los programas de entretención de la mañana. Este 88% de aumento en género informativo es muy superior al aumento total de la oferta televisiva en el mismo período: 22%. Y superior al crecimiento de todos los demás géneros televisivos, salvo el de entretención, que subió 146%. Es decir, en un contexto donde los otros medios (tradicionales y nuevos) están aumentando la oferta informativa global, la TV ha respondido… con más información. Y su estrategia de sobrevivencia se ve clarísima: concentrarse en sus fortalezas, información y entretención. A PESAR DE LA INSATISFACCION, LA CONSUMEN MÁS En 1997, considerando el tiempo que ocupábamos frente al televisor, uno pensaría que habíamos alcanzado el límite de nuestra capacidad de deglutir información en TV abierta. Bueno, 10 años después estamos consumiendo un 42% más. Aunque ha caído en el último par de años (impacto del TV Cable, incluyo 1997), igual es un dato extraordinario. En un contexto medial extremada y crecientemente competitivo, la gente decidió aumentar su ingesta de info en TV. Es decir, a pesar de la fragmentación del consumo medial general, la TV se ha adaptado exitosamente y es capaz de generar mayor demanda por su oferta. En muchas encuestas la gente se declara muy insatisfecha con la TV, y muchos comentaristas majaderos usan esto para denostar su aporte y para anunciar una crisis tan terminal como imaginaria. Bueno, este artículo demuestra que no están viendo el panorama completo. No se trata de ser complaciente, sino de leer mejor esa insatisfacción (que por cierto, es real). Las personas reclaman contra la TV, pero a la hora de actuar, no la reemplazan por la radio, las novelas o el diario -cuyos consumos van en baja. Tampoco la apagan. Por el contrario, deciden ver más información por TV. ¿Será masoquismo? ¿Estupidez? No lo creo. La competitividad ha jugado un rol clave en este crecimiento: ha diversificado las alternativas y ha fortalecido su consumo. Un gran ejemplo son los noticiarios centrales. En 2006 muestran un nivel de competitividad radicalmente distinto al de una década atrás. Entonces sólo TVN y Canal13 roncaban. Ahora Mega y CHV pelean con ellos en una misma liga. El gráfico lo muestra muy claro, e inspiró a nuestro amigo Juan Pardo a bautizarlo como “el efecto calamar”. LAS RAZONES DEL ÉXITO EVOLUTIVO DE LA TV A nuestro juicio, el éxito de la información en TV abierta se explica en buena medida porque tiene ventajas comparativas imbatibles respecto a otros medios. Sigue siendo el único medio realmente masivo. Sólo la TV provee una plataforma única y una experiencia común para que todos accedan a “la información que hay que saber”. Además, la credibilidad es clave, y ahí la imagen en movimiento es insuperable como representación de lo real. Pero además compite muy bien con las supuestas ventajas comparativas de otros medios. En profundidad y variedad -atributo clásico de los medios escritos- la amplia gama de formatos de los programas informativos ha hecho crecer a la TV. Ahí están, por ejemplo, los noticiarios de medianoche, agudos y punzantes (Paulsen y sus imitadores), o los noticiarios matinales, extendidos y más relajados. Y con avances todo el día, la TV cumple muy bien la demanda de inmediatez –tradicionalmente asociada a la radio, y ahora a Internet. Con mucha razón la TV se concentra en la información como uno de sus pilares estratégicos (el otro es la entretención): le resulta muy bien. Y, como dice el artículo, concentrarse en lo que uno hace bien es una excelente decisión para enfrentar una competencia intensa. ::::::::::: PD: A quienes les interese pueden ver aquí info para bajar gratuitamente un software con todos estos datos: la oferta y el rating de 10 años (1197-2006). Lo diseñamos –Conecta y TimeIbope- con el objetivo abrir la conversación y estimular a que académicos, periodistas e interesados exploren y hagan sus propias interpretaciones. Está en sus manos.

7 comentarios:

Glock dijo...

¡Excelentes datos! Una pregunta: ¿cuáles fueron los criterios para definir "información" o "contenidos informativos" en el estudio?

Luis Argandoña dijo...

Glock, así definimos contenidos informativos:

"Para el análisis de la evolución de oferta y consumo de contenidos informativos se
aplicó una definición más bien restringida. Definimos como contenidos informativos a
los que aparecen en programas informativos, es decir, aquellos de las áreas de prensa,
incluyendo noticiarios, avances, programas de reportajes, de entrevistas de actualidad,
políticos y otros. Se excluyeron algunos programas que en las definiciones seguidas por
la industria se clasifican dentro de los programas informativos: talk-shows, reality-shows
e infomerciales. Éstos no estarían dentro del tema de "conexión con lo público" y por ello, para
nuestro propósito, no fueron incluidos". Saludos.

Anónimo dijo...

puta la huevá fome

Unknown dijo...

Luis, hola, soy Mauricio Contreras, de la radio Horizonte.
Necesito conversar contigo, mi mail es mcontreras@horizonte.cl

Espero respuesta

Gracias

Lucas dijo...

así como dices que la lectora que opinaba sobre la prensa (algo obvio, pero que por eso mismo se les olvidó a todos)debería dejar el anonimato, tú deberías dejar tu mail en alguna parte.

porque me gustaría conseguir el libro y hacer alguna nota al respecto, así como mi colega de la horizonte.

saludos.-

Luis Argandoña dijo...

Perfecto. Ya lo puse arriba. Saludos.

Interiorbruto dijo...

Sabes donde puedo comprar ese libro? Revisé algunas librerías en internet y no aparece.