27 de febrero de 2007

DIARIOS Y MULTIMEDIA EN CHILE: ¿PERIODISMO EN MOVIMIENTO?

Me gustan mucho los diarios. Lo que significan como el resumen de un sofisticada coordinación humana y, también, como el objeto físico que es. Su materialidad. La textura del papel, el olor a tinta. Me fijo en los detalles de la impresión, en el dibujo del serif en una letra diminuta, en las fotos ligeramente descalzadas. Cuando veo una gran mancha de tinta cruzar una página completa, me da placer imaginar que, por un segundo, un rollo de papel se enredó al pasar por la imprenta y, casualmente, ese trozo de papel llegó a mis manos. Cosas así. Pero esto es puro fetichismo. McLuhan decía que cuando una tecnología desplazaba a otra, ésta última se redefine y pasa a convertirse en una forma de arte (ej, la fotografía en blanco y negro, los discos de vinilo, etc). Esto mismo le podría pasar a los diarios. Y sería una pésima noticia... a menos que empiecen seriamente a reinventarse y a liderar la redefinición de la experiencia de consumir noticias.
Todo esto implica redefinir la forma en que las empresas periodísticas se ven a sí mismas. En el futuro, los contenidos serán consumidos en una multitud de formatos. La tinta y el papel serán siendo uno importante, pero sólo uno entre muchos. Lo que está ocurriendo con la incorporación de video en los sitios web de diarios es sólo un ejemplo de esto. La entrada del multimedia está revolucionando las salas de prensa de los principales diarios del mundo. Aceptémoslo. La imagen en movimiento es la especie dominante hoy por hoy.
Pero nuestras empresas periodísticas impresas no parecen tomar esto muy en serio. La Tercera tiene un espacio multimedia muy acotado y pobre (mucho trailer de películas y publicidad). Emol también, aunque hace especiales multimedia de buen diseño y lanzó tímidamente su canal de video con Fórmula 1 en el Parque Forestal. Igualmente es un espacio muy irregular en contenidos y no muy profesional. LUN, con otra estrategia, ha experimentado levantando videos sobre la imagen de su edición impresa en www.lun.com. Es interesante, porque el video se incorpora a la experiencia de consumir el diario, pero aún aparece sólo como un "chiche" demasiado caprichoso e irregular. Lo que todas estas propuestas en video tienen en común es que no hay una intención editorial de generar contenidos relevantes, verdaderamente noticiosos. En mi opinión se debiera apostar e invertir más seriamente en hacer periodismo con todas las armas disponibles. No es barato y no ocurrirá rápido. Los periodistas, además, no creen para nada en el multi-periodismo (fotoperiodistas, videoperiodistas).
Pero es un carro al que los diarios, como empresas mediales multiplataforma, deben subirse sí o sí.
Kurt Andersen, de New York Magazine, dijo hace unas semanas "Me imagino a los portales de web-video de los diarios como la alternativa preferida en periodismo 'televisivo' para la gente inteligente".
Y en un artículo del Editors Weblog, Laurent Rich Fine, analista de diarios para Merrill Lynch & Co. es aún más demoledora en su consejo: "No pierdan tiempo en recuerdos nostálgicos, especilamente si los diarios ya están experimentando con características online que han probado su capacidad para atraer lectores y dinero".
En el mismo artículo se refiere un estudio de Borrel Associates que dice: "Créanlo o no, los diarios -en EEUU- son líderes en rentabilidad por ofrecer video online con fines de avisaje, principalmente avisos clasificados en video o informerciales de larga duración. Por este concepto tuvieron más ingresos que las estaciones de TV locales en 2006".
Es decir, el video es una alternativa real, no sólo de periodismo sino apoyando un nuevo modelo de negocios.
Por último, vean con atención este video de Apple, que muestra cómo el Washington Post está desarrollando su apuesta de futuro: periodismo multimedia con todo el estado del arte de la tecnología.
Hacia allá hay que moverse.

3 comentarios:

Roberto Carreño dijo...

Tengo la sensación de los editores están pendientes de su competencia que no están dispuestos a "perder el tiempo" en probar y apostar por contenidos, distintos a los que el Gobierno y la TV abierta entrega. Muchos menos a experimentar con esa misma valiosa información, y exponerla a nuevos formatos, porque claramente desestiman la capacida técnica de sus lectores y asumen que no serán capaces de acceder a estos riesgos o pruebas comunicacionales.
Habrá que esperar que sucede con el tiempo, y lo que los balances anuales les reflejen.

Saludos

Luis Argandoña dijo...

Tienes razón Roberto, es poco probable que las empresas mediales locales se enfoquen en apuestas y desafíos sin un modelo de negocios "probado". El mercado es pequeño y su consumo de contenidos parece algo débil. Por último, los ejecutivos conocer muy bien su negocio y saben qué funciona y qué no.

Pero mi punto más de fondo es que, en la práctica, veo pocas señales de que las empresas mediales se definan -en espíritu- más allá del formato clásico en el que han operado en los últimos 20 años. Los diarios en el papel, los canales en la pantalla. (El tema del video online es sólo un ejemplo de todo esto)

Independiente de que puedas seguir haciendo aquello en que te manejas mejor, pienso que el formato cada vez va a importar menos (menos aún si es un formato único), y la capacidad de producir contenidos de calidad (en el formato que sea, y con las ventajas de cada uno) será lo que marque la diferencia.
Saludos.

Alejandra dijo...

Mil veces prefiero leer el diario en papel antes que verlo en internet. Igual uso internet y a veces es muy útil, pero prefiero medios específicamente dedicados a internet y los diarios aparte. Está bien que El Mercurio, La Tercera, LUN, etc, usen su página web como complemento, pero no creo que se acabe el papel en el mediano plazo, no acá al menos. Lo echaría mucho de menos si fuese así, aunque cada vez que los lea vaya después a lavarme las manos con mucho jabón por la tinta. Saludos!